A veces podemos colgar en la pared la cosa más sencilla y hacer que quede fenomenal. Eso es lo que pasa cuando nos decidimos a colgar un aro de bordar con un bordado que hicimos en el cole, o ese trozo de tela que siempre nos había gustado, o cualquier cosa que se nos pueda ocurrir. Original, divertido y totalmente personalizado. ¿Qué os parece?
Sorry, unknown source
Sorry, unknown source
Sorry, unknown source
No hay comentarios:
Publicar un comentario